Siguiendo el ciclo de vida del cliente, o en este caso, del futuro cliente de ING, a camino entre la Cuenta Mini para menores y las cuentas para adultos, ING necesitaba crear un producto que ofreciera los servicios que los adolescentes empiezan a demandar con todas las garantías para los padres.
De esa necesidad ha nacido la Cuenta START, una cuenta corriente destinada a los adolescentes entre 14 y 17 años con una experiencia adaptada a su edad. Un movimiento muy inteligenteque trata de ofrecer un producto bancario en un momento en el que el cliente está siendo totalmente bombardeado por publicidad en las redes sociales de neobancos estilo Revolut o Trade Republic.

Esta cuenta online, carece de comisiones, permite a los padres controlar y poner límites al uso que hacen sus hijos de la misma, ofreciendo a la vez un servicio transaccional al adolescente, transferencias, Bizum y tarjeta de débito.
Para abrir esta cuenta los padres han de tener una cuenta Nómina o NoCuenta, es decir, ser ya o hacerse clientes del banco. Una vez facilitado los datos del menor este podrá disponer de su propia aplicación para controlar sus finanzas, y como expliqué anteriormente, de forma totalmente supervisada por los padres así como posibilidades de limitar ciertas funcionalidades como la compra por Internet con la tarjeta.
Una vez que el menor cumpla los 18 años automáticamente esta cuenta se transformará en la Cuenta NoCuenta, por lo tanto, teniendo en cuenta que ING «no olvida» a sus ex-clientes a la hora de conseguir promociones por domiciliar la nómina, esto no debería de afectar al menor y pudiera acogerse en el futuro a alguna promoción que le bonifique económicamente por domiciliar sus ingresos. Mantendrá el mismo número de cuenta y demás, pero el mayor de edad autorizado, que únicamente puede ser uno, dejará de serlo en ese preciso momento.