Según se establece en el Código Civil los dictámenes del Tribunal Supremo sientan jurisprudencia al conferir a sus criterios cierta capacidad de transcendencia normativa.
Pues bien, en La Sala de lo Civil del Alto Tribunal se acaba de dirimir la sentencia de un cliente que fue víctima del famoso SIM Swapping, por el que los estafadores, tras el duplicado de la tarjeta del cliente, sustrajeron 80.000 euros de su cuenta de Ibercaja. Entendemos que solicitando los códigos de confirmación necesarios para realizar transferencias así como recuperación de claves.

Se da la casualidad de que dicho cliente avisó a la entidad de que días anteriores al robo había recibido ciertos mensajes de transferencias no solicitadas y alertas de seguridad comunicadas por Google. La entidad, según dice la sentencia, no extremó las precauciones a pesar de estar advertida, aunque consiguió recuperar 27.000€ de lo sustraído.
El magistrado no considera normal e irrelevante que un usuario que nunca realiza operaciones de madrugada ese día realizara hasta 17 operaciones de alto importe, incluso alguna denegada por superar los límites de Bizum.
Es por tanto que dicho Tribunal Supremo condena a Ibercaja a devolver el importe al cliente y elimina ciertas cláusulas de los contratos que aumenten la carga de la prueba sobre el consumidor, teniendo además que vigilar las operaciones, importes y destinatarios en horarios no habituales para requerir la firma digital de las mismas.
+ Info: Confilegal